Sueño del 12 de febrero de 2018

En la oficina cada quien tiene en su lugar una pila de papeles, no me deshago de los míos por si hay que reciclarlos. Pero en cuanto nos dicen que ha llegado papelería nueva, comienzo a deshacerme de ellos.

A la salida, interrumpo a una compañera entretenida en la plática con otras, para preguntarle si vamos a meter un escrito para que no haya problemas con su trabajo y me dice que todavía no. Salgo del edificio sin suéter, creo que se pondrá fresco por la tarde; me sumo a dos compañeros.

En casa veo que la pintura está fresca en la pared, tomo el rodillo y la extiendo un tramo más, no cubre por completo, pero mi mamá me dice que así está bien; hay una veladora de pared y el azul celeste transmite paz mientras se la observa.