He estado pasando a word los sueños de 2020, como los tengo anotados en tableta, hojas sueltas y en cuadernos regados, tras estos meses de estar enfocada en los de años anteriores, me di a la tarea de localizarlos y aprovechando, emprendí otra búsqueda de sueños de años pasados, y sí, descubrí más entre páginas de libros, de tal manera que me siento de nuevo rebasada.
Además, apenas reparo en que, del primer blog que cubre el diario de sueños de 90 al 92, no pasé a word todo su contenido, con eso de que abrí en seguida otro blog para insertar los sueños del diario del 93-96 y luego Zona Libre para cubrir los de 2007 en adelante, así que estoy de nuevo en el mismo punto. Ignoro si esta libreta electrónica prestada tenga, como en excel, una opción para insertar hojas, en este caso serían entradas y colocar los sueños en orden cronológico, lo cual ayudaría mucho.
Afuera, junto al lavadero, tengo cajas de libros escolares y libretas (no hay mucho espacio), no creo que hayan ahí entre sus hojas, sueños de ciertos años, fueron años algo agitados, ya lo iré viendo conforme marche esto. Mientras tanto, mi deseo de subir los sueños de 2020 en este blog será postergado. No he corregido mis cuentos, y creo que necesitan también tiempo y trabajo, mucho trabajo. No abandono este blog, es trabajo en proceso, de búsqueda, transcripción, corrección de estilo, ilustración y otras cosillas más que me tomarán tiempo. Considero que si ya me he llevado años en esto por gusto y necesidad, unos meses más, si se me permiten, no serán nada, y es lo mejor para que ganen los textos.
Por último, a falta de un diario de japonesita (registrar los sueños en tableta me parece algo tan frío, no me convence), me quisiera regalar la confección de una libreta, para ya no tener este relajito de pesquisas.